sábado, 11 de febrero de 2012

Ralentizar la moda es economía verde



El 5% del espacio de los vertederos en Estados Unidos está ocupado por ropa. Nos lo cuenta el Council for Textil Recycling.  Cualquier otro país desarrollado no estará lejos. 







Nos deshacemos con facilidad de nuestras prendas, y ha costado mucho hacerlas. No nos referimos a las horas empleadas, que también, sino al sacrificio que comportan: el precio de agredir al planeta y sobre todo, las condiciones laborales, rayanas a la esclavitud en algunos casos, que soportan algunos de los más de 40 millones de trabajadores textiles del mundo. 






Si desechamos tanta ropa es porque nos resulta fácil conseguirla: es muchísimas tiendas,  está a buen precio, los diseños cambian constantemente y queremos estar a la moda. 
La pregunta es fácil: ¿podemos vestir, o consumir moda, con menos impacto?
La respuesta es algo más complicada: Sí, es posible, pero requiere esfuerzo, por parte de los consumidores y por parte de los productores. 
Manejar información es un buen arranque: una camiseta que nos cuesta 8 euros seguro que implica un pésimo sueldo y una producción cuando menos, descuidada con el medio ambiente. 




Otro dato que aporta la Campaña Ropa Limpia: si a un trabajador que cose una camiseta que se vende a 20 euros, se le doblara el sueldo, el precio de esa prenda aumentaría tan sólo entre un 0'10 y 0'50 céntimos. 
Pensar en verde es una oportunidad de negocio que encontrará esperando a aquellas personas - clientes- que se han empezado a hacer estas preguntas y que tiene el apoyo del Programa Medioambiente para el Desarrollo de Naciones Unidas



Existen métodos que aplican las últimas innovaciones tecnológicas para disminuir el gasto de agua hasta un 96%  y reducir los productos abrasivos en la elaboración de tejanos desgastados, una práctica altamente contaminante.





Existen prácticas agrícolas que permiten cultivar el algodón, tan dependiente del agua, reduciendo el gasto al mínimo y sin usar pesticidas, herbicidas y todo tipo de abonos químicos cuyos restos se mezclan luego en los suelos. El Mar de Aral se ha secado por el uso abusivo de agua para el algodón.



Existen tintes naturales que son tan permanentes como sus hermanos químicos, que en poco más de siglo y medio de existencia han sido devastadores para algunos ríos del mundo, como el Yangtsé, en China al que vierten sus residuos contaminados multitud de factorías textiles. 




Existe la producción local, con grandes artesanos y profesionales, que frenan la deslocalización, y por tanto el desplazamiento de toneladas de ropa por el mundo generando altísimas emisiones de dióxido de carbono por el transporte. 




Pocos son en España los creadores que las implementan en los abrigos, pantalones y camisetas que producen. Pero alguna estrella solitaria lucha con tesón para volvernos a enamorar con la verdadera moda con criterios sostenibles.Otros emprendedores engrosan la tendencia que debería ser normalidad con ideas brillantes: se puede intercambiar, reutilizar renovando la ropa, zurciéndola y reciclándola. Convierten estas opciones personales, que son un estilo de vida, en un negocio próspero. 
Porque no hay ninguna necesidad de cambiar de armario cada seis meses. 

Slow fashion equals Green Economy.

In the United States 5% of the landfill space is filled with discarded outwear and,as The Council for Textile Recycling reports,  the rest of the developed countries are not far from this statistic.
 
We are used to throw away anything and getting rid of our clothes has become as easy as throwing away anything else.  When we throw a garment in our bin we don´t realize the price our planet has paid to produce it: the immense waste of natural resources and a workforce of forty million people who sometimes do their work under depriving conditions and, in extreme cases, in  grating conditions of slavery.

If we get rid of that much clothes is because they are cheap and easy to get . The fashion dynamics compels us to follow the new trends each season at increasingly higher pace. Time has come now to ask  ourselves what can we do against this “fast fashion” .

The question is easy : What should it be my approach to  fashion where I find myself wanting to buy and wear clothes but wanted to be  also aware of the environment ?

The answer it´s a bit more complicated: we believe that responsible buying it´s possible but it requires a bit of thought an effort either for the costumer as for the producer. It is obvious that hidden under an eight euro t-shirt lies a really  low salary and probably highly contaminating practices.  

Another interesting  fact from the  Clean Clothes Campaign report  is: if  the salary of a 20 euro t-shirt  maker  was doubled, the final  t- shirt  price at the retailer would increase  only from 0,10 to 0,50 cents of euro.

Thinking green has become a business opportunity and will become a new market  for newly environmentally conscious customers, this are  the people supported by the Environmental Program for Development from United Nations.

We have  new technologies to cut water waste and to avoid chemicals. We know that processes as  sandblasting for wearing out jeans are highly polluting.

We have new ways of growing cotton as  the old water wasting procedures  use  pesticides and chemical fertilizers which have been polluting the soil for years. The extinction of the Aral Sea is an example of this abuse.

We have natural dyes which fixing on fabrics is as good as the ones containing harmful chemicals. Nasty chemical based  dyes  have been widely used during the last century and they have severely polluted  some rivers like the Yangtsé in China.

We have little businesses using local resources to produce their fashion. Being  as local as possible, working with  artisans and neighbouring labour  contributes to eliminate  the carbon footprint .

There are only a few of this conscious designers in Spain, from time to time a lonely star emerges to fight against the elements and delivers an amazing example of  green  sustainable  fashion. Other  entrepreneurs all over the world follow this green trend too. This new designers have brand new  ideas to change the fashion as we know it: wardrove exchanges, re-using and renovating old fabrics and garments, mending or recycling them ... this new citizens  are simply generating businesses out of their new greenlife style. Because there is no need  for changing our wardrobe every six months.

11 comentarios:

  1. Muy interesante! Muchas gracias por el post y vuestro trabajo de divulgación!

    ResponderEliminar
  2. Es importante que os hagáis eco de estas ideas de una manera tan fresca y positiva, dándonos a entender que es POSIBLE un camino más sostenible sin excesivo trabajo, que es posible consumir sin dejar una huella ecológica tan bestia, que es posible vestir sin haber participado, al comprar un producto, en las malas prácticas empresariales con respecto a las personas que producen, que es posible estar a gusto contigo misma, siendo precisamente tú misma y amando un poquito más lo que tienes viéndolo desde otra perspectiva...

    En fin, que hay que seguir informando, como venís haciendo de forma constante y con esfuerzo, aunque a veces se piense que todo cae en saco roto, porque yo creo firmemente que es el consumidor final quienes tenemos la sartén por el mango y quienes finalmente podemos hacer que LA PRODUCCIÓN sea más responsable si así nos lo proponemos. Simplemente tenemos que EXIGÍRSELO AL MERCADO ¿no?... Y no es una utopía ;). Ahora ya no.

    Por ello, seguid Naturóticas, que seguro algo cambiará :)

    ResponderEliminar
  3. Ojalá que la industria de la moda tenga, algún día, la sostenibilidad como valor central. Mientras tanto, lo mínimo que podemos hacer nosotros es apoyar a quienes van por delante en este aspecto.

    Enhorabuena por el post.

    ResponderEliminar
  4. Conversación con una amiga:
    - que guapa estas!! Esta chaqueta te queda superbien!!
    - uff, pues es un chollazo, solo 12€!!!
    - no te das cuenta que no puede ser, tan barato es un coste muy alto en salarios y medioambiente...
    - que vaaaa
    Le he enviado vuestro post, tan claro y entendible...
    Ojalá lo vea claro de una vez. Gracias por explicarlo tan bien

    ResponderEliminar
  5. ¡Viva el fondo de armario! De las experiencias "gratuitas" más gratificantes que existen. Un post muy chulo. Congrats!

    ResponderEliminar
  6. Gracias por hacernos ver que las gangas en la ropa no son ninguna ganga para la personas que son explotadas ni para el medio ambiente que resulta agredido. El secreto, las tres R, Reducir, Reciclar, Reutilizar Se necesitan más blogs como este!

    ResponderEliminar
  7. Un blog muy interesante! Estoy de acuerdo totalmente. Es muy importante concienciar a la gente y difundir estas ideas a nivel mundial para luchar contra el consumismo sin control y el malgasto en general. Todos somos responsables. MARTA

    ResponderEliminar
  8. Gracias por todos vuestros comentarios. Nos confirman lo que ya creemos: la moda sostenible no es un capricho, es un estilo de vida. ¡Ahí seguiremos!

    ResponderEliminar
  9. Ya hay un sitio en España para copmprar eco moda. Se llama Wabi Sabi Ecofashionconcept. A tráves de nuestras tienda vendemos ropa ecologica y complementos sostenibles. Pasión por la calidad, el diseño y la sostenibilidad. Ven a conocer la Eco-Moda.

    www.wabisabitienda.es

    ResponderEliminar