martes, 10 de enero de 2012

El tinte de la cochinilla es natural

Si ves un campo de tuneras mustio andando por Lanzarote, no te angusties, no es mala señal.



Aclaración número 1: las "tuneras" son chumberas, cactus, vaya. 
Aclaración número 2: no es mala señal que estén mustios porque eso significa que la cochinilla está en su esplendor. 






Estos campos de tuneras rodean Mala, en Lanzarote





A eso vamos: los productores de tuneras lo que quieren que prolifere es la cochinilla, ese gusano, parásito del cactus, que se convierte en púrpura, granate, berengena o marrón a través de un proceso natural. 






Durante décadas las islas Canarias, en especial Lanzarote, vivieron el auge de la cochinilla, que se utilizaba como colorante, para la alimentación o la cosmética, o como tinte. Pero la implantación de los tintes químicos arruinó el negocio.


Chana es el alma de la asociación y el proyecto




De las hectáreas que entonces producían sin parar hoy apenas queda un 10%. Pero Chana, como conoce todo el mundo a Sebastiana Perera, se propuso cambiar eso. Para ello se embarcó en un proyecto cuya primera intención era pedagógica. En la pequeña localidad de Mala, al noreste de la isla, la maestra de la escuela rural , que era ella, decidió que los chiquillos y chiquillas tenían que conocer el mundo que les rodeaba, y la cochinilla fue el punto de arranque y enlace con el mundo que estaba fuera de las  aulas.





Han pasado casi diez años de eso, y además de un proyecto escolar exitoso, de esa iniciativa nació la Asociación Milana, fundada en 2005, y a la que Chana, ya jubilada, se dedica en cuerpo y alma apoyada por un grupo de voluntarios. 

Este es el aspecto de una hoja de cactus recubierta de cochinilla



Juan nos muestra cómo se recolecta



"Aquí la cochinilla se recogía y se exportaba, no había cultura de transformación", nos cuenta Juan Cazorla, que es biólogo y nos atiende hoy junto a Chana como miembro de la asociación. La recolección es simple: con una milana - el recipiente en que se recoge la cochinilla y origen del nombre de la asociación - y una cuchara: eso sí, hay que evitar matar al animal porque si no, se pierde.





Tras secarla, la cochinilla se muele



La sede de Milana está en la escuela, blanca como todas las edificaciones de la isla, en la antigua vivienda de Chana. Desde allí, se han dedicado paso a paso a poner en contacto a los productores de cochinilla con los artesanos de la isla, para que estos empezaran a aplicar esos tintes naturales. 






"Hubo que investigar, y todavía lo hacemos, porque la cochinilla por si sola no sirve, necesita un mordiente", nos adiestra Chana mientras nos enseña la gama de colores que se pueden conseguir, "y cada uno da un color distinto". 





Por mordiente se entiende el fijador, lo que fija el color. "Puede ser zumo de limón, bicarbonato u óxido de hierro, estamos probando ahora con ortiga" añade Juan, y las combinaciones son infinitas. Hasta el color negro se consigue.






En Europa la cochinilla no abunda, procede de América. Chile y Perú son los grandes productores intensivos que ofrecen precios con los que los canarios no pueden competir, de ahí que les cueste abrir mercados. "Por eso es importante implicar al artesano", Chana transmite con pasión.


No ha sido fácil pasar del cactus...



...a este vestido



La visión de Chana, o de Juan, se sintetiza en que la cochinilla significa mucho más en Mala, esa localidad brillante enmedio del malpaís negro a los pies de uno de los muchos volcanes de la isla. Y en todo Lanzarote. Mala tiene el mar enfrente, y por ahí es por donde han visto que les puede llegar el futuro: dándose a conocer, sorprendiendo en sus visitas a la península o por el extranjero contando la historia de un pequeño gusano que forma parte del pasado pero también puede ser un pasaje de futuro para esta isla. 

(La asociación, como veréis en su página web, hace un intenso trabajo de difusión de este cultivo, a través de seminarios, talleres y rutas así como la promoción del catálogo de prendas que elaboran los artesanos locales. En el Museo Textil de Terrassa, Barcelona, durante estos meses se puede ver parte de esas creaciones en la exposición "Colores del Mediterráneo".



























1 comentario:

  1. Felicidades por el post, es muy interesante y esta plasmado de una forma muy original y clara.
    Mil gracias

    Alber Verding
    www.verding.es

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